Hemos visto la tortuga !!!!!!!! (31-03-2011)

Hola a todos,

Rodrigo parece haber asimilado que somos sus padres y que nunca lo vamos a dejar. Disfruta mucho a nuestro lado y parece sentirse seguro, cosa que nos alegra un montón. Cada vez que lo miramos nos dedica una sonrisa y suelta un "aghho", la verdad es que en los cinco días que llevamos juntos ha espabilado un montón.

Estos dos días nos hemos dedicado a pasear los tres juntos y hacer algunas compras. Desgranamos un poco las jornadas.

Ayer fuimos en triciclo (de esos típicos orientales) al mercado cubierto de Dong Xuan. En un triciclo iba mamá, y en otro Rodrigo y yo. Ni que decir tiene que "la carrera" la ganó mamá por una cuestión de peso. En el mercado había de todo multiplicado por mil, y las señoras de los puestos salían a ver a Rodrigo, preguntaban si era vietnamita. Nos decían que lo cuidáramos mucho,... y luego en vietnamita gritaban a la del puesto de al lado algo así como "...María ven acá pa cá que estos tienen un bebé vietnamita". Entonces venía la María, y la Paquí, y la Juani, y la.... jo que agobio, cada vez había mas gente dándole achuchones a Rodrigo (eso sí, él tan feliz de escuchar palabras en vietnamita y no las tonterías que soltamos su madre y yo en castellano).

Luego paseamos por las calles de los gremios y visitamos una casa museo típica vietnamita.

Hoy por fin ha salido el sol y ha hecho calor, yo creo que esa es la razón por la que se ha dejado ver una de las míticas tortugas gigantes del lago Hoan Kiem, como la hemos visto la cultura de Hanoi nos auspicia 7 años de buena suerte.

Estuvimos comprando por las tiendas (yo me he pillado un licor que viene una serpiente cobra dentro) y Carmen se ha comprado un Ao Dai a medida. El Ao Dai es el traje típico de las mujeres vietnamitas, y la verdad que le queda de escándalo. Hemos comprado otro para Lucía y ha Rodrigo le hemos encargado uno típico de hombres (más bien de niño).

Por la tarde hemos ido al museo de las mujeres vietnamitas. La verdad es que merece la pena y es un homenaje a estas pequeñas mujeres que tienen una fuerza y capacidad de trabajo impresionante. Esas señoras que se ven con las bicicletas y los platillos cargados hasta las trancas están todo el día trabajando en unas condiciones durísimas para sacar a sus familias adelante. Desde aquí queremos agradecer enormemente el sacrifico y esfuerzo de una de esas mujeres anónimas que decidió seguir adelante con un embarazo para que nosotros pudiéramos volver a ser padres. MUCHAS GRACIAS.

Para acabar la jornada fuimos a un local de masaje orientales. Hoy me ha tocado a mí (Carmen se quedó con Rodrigo) pero el domingo cambiaremos las tornas. La verdad que en una hora me han quedado como nuevo (después del masaje me dí cuenta lo mal que estaba antes). La señora masajista era muy chiquitaja pero se me subió encima y demostró tener una fuerza asombrosa, me han crujido hasta os dedos de los pies.

Mañana nos vamos de viaje un par de días a la Bahía de Halong, así que no escribiremos hasta el sábado.





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